Desde el momento en el que estás embarazada, tu hijo se convierte en una prioridad en tu vida. Cuando nace, aún más, y es natural. Sin embargo, tu atención focalizada en el nuevo integrante de la familia y los quehaceres en el hogar podrían provocar que dejes de lado algo importante, tu vida sexual con tu pareja. No dejes que esto te pase, pon en práctica estos consejos.
- Acordate que después del parto, los médicos le recomiendan a la pareja un período de abstinencia sexual de 30 a 40 días. Esto permite que te recuperes físicamente.
- Sentite bien contigo misma y aumentá tu autoestima. Es importante hacer algo de ejercicio para sentirte bien con tu aspecto. Esto influye mucho en el acercamiento que busques con tu pareja.
- Dense un espacio. Tal vez es difícil darse un tiempo de pareja cuando tu hijo es muy pequeño pero a medida que va creciendo, encuentren su propio espacio para disfrutar uno del otro. Es cuestión de aprovechar el momento.
- No se apresuren, todo a su tiempo. Acordate que el vínculo entre madre e hijo es muy fuerte y durante los primeros meses es normal que toda su atención esté puesta en él. Con el pasar del tiempo, tu pareja y tú deberían retomar su vida sexual.
- Buscá ayuda. Es ideal contar con alguien que te pueda dar una mano con tu hijo, además de no agotarte tanto y tener tiempo para descansar, podrás dedicarle algunos momentos a tu pareja.
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